La Paradoja de la Innovación: ¿Es la IA la Nueva Electricidad, Llevándonos a un Hundimiento al Estilo de los Felices Años Veinte? 🌐 crash 💰


El auge de la electrificación en la década de 1920 impulsó a Estados Unidos a un siglo de dominio industrial y una revolución económica global. Sin embargo, antes de que la electricidad se consolidara como una infraestructura "invisible", el mundo experimentó profundos cambios sociales, una burbuja especulativa, un hundimiento bursátil catastrófico, desempleo masivo y una década de agitación mundial. 🌍 Comprender esta historia es crucial hoy, ya que la Inteligencia Artificial (IA), una tecnología de propósito general similar, parece destinada a remodelar cada aspecto de la economía. Sin embargo, la IA ya muestra rasgos distintivos del ascenso, apogeo y posible colapso que vivió la electricidad en los "Felices Años Veinte". La historia económica sugiere que un ajuste de cuentas podría estar a punto de repetirse.


⚡ El Auge de la Electricidad: Una Venta Fácil y la Promesa de un Futuro

Hace un siglo, las "inversiones de alta tecnología" en la Bolsa de Nueva York se referían a la electricidad. Inversores vertieron capital en proveedores como Electric Bond & Share y Commonwealth Edison, así como en empresas que aplicaban la electricidad de formas innovadoras: General Electric (electrodomésticos), AT&T (telecomunicaciones) y RCA (radio). No era difícil de vender; la electricidad trajo cine moderno, nuevas revistas impresas más rápido y veladas junto a la radio. Era un claro motor de cambio económico, prometiendo automatización, mayor productividad y un futuro de ocio y consumo. En 1920, incluso Vladimir Lenin declaró: "El comunismo es el poder soviético más la electrificación de todo el país". Hoy, una urgencia global similar envuelve a países comunistas y capitalistas respecto a la IA, sobre todo por sus aplicaciones militares. ⚔️ Este paralelismo histórico sugiere la potencia disruptiva de la IA, pero también las lecciones no aprendidas de ciclos tecnológicos anteriores, como la necesidad de una infraestructura robusta que vimos en el centro de datos submarino de China en Hainan, una innovación que busca eficiencia y capacidad en la era digital.


🚀 El Apogeo: Concentración de Mercado y el Nacimiento de un Ecosistema

Al igual que las acciones de IA ahora, las acciones de electricidad se convirtieron en las favoritas del auge, aunque sus fundamentos eran difíciles de evaluar. El poder de mercado estaba altamente concentrado: grandes actores usaban complejas estructuras de participación para eludir normas y vender acciones de las mismas empresas bajo diferentes nombres. El profesor Harold Bierman estimó que las empresas de servicios públicos representaban el 18% de la Bolsa de Nueva York en septiembre de 1929. Dentro del suministro eléctrico, el 80% del mercado estaba en manos de un puñado de sociedades de participación.

Pero, como hoy con la IA, el ecosistema era mucho más amplio. Casi todas las megaempresas de los años veinte debían algo a la electrificación. General Motors superó a Ford utilizando nuevas técnicas de producción eléctrica. Esencialmente, la electricidad se convirtió en el telón de fondo del mercado, de la misma manera que la IA lo está haciendo, mientras las empresas buscan convertirse en "habilitadas por IA". No es de extrañar que hoy los gigantes tecnológicos controlen más de un tercio del índice S&P 500 y casi tres cuartas partes del NASDAQ. La tecnología transformadora impulsa no solo el crecimiento económico, sino también una concentración extrema del mercado. En 1929, para reflejar la importancia del nuevo sector, Dow Jones lanzó el Dow Jones Utilities Average, cargado de electricidad.


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📉 El Hundimiento: De la Promesa al Colapso Global

El Dow Jones Utilities Average alcanzó los 144 puntos en 1929; para 1934, se había desplomado a apenas 17. 📉 Ninguna causa única explica el "Gran Hundimiento" de la Bolsa de Nueva York, que comenzó el 24 de octubre de 1929 y precedió a la Gran Depresión mundial. Este hundimiento desencadenó una crisis bancaria, el colapso del crédito, quiebras empresariales y una caída drástica de la producción. El desempleo se disparó del 3% al 25% de los trabajadores estadounidenses en 1933 y se mantuvo en dos dígitos hasta la Segunda Guerra Mundial.

Los efectos dominó fueron mundiales, con un aumento del desempleo en países dependientes del comercio internacional como Chile, Australia, Canadá y Alemania. La prometida era de ocio eléctrico se convirtió en comedores sociales. El colapso expuso fraude y excesos. Samuel Insull, protegido de Thomas Edison y constructor de Commonwealth Edison, llegó a valer $150 millones, pero tras la quiebra de su imperio en 1932, fue acusado de malversación. Aunque absuelto, 600.000 accionistas y 500.000 obligacionistas lo perdieron todo. Insull fue visto como un chivo expiatorio de un sistema con defectos más profundos.

Siguieron reformas impensables en los años del auge. La Ley de Sociedades de Participación de Servicios Públicos de 1935 disolvió las enormes estructuras y separaciones regionales impuestas. Las antes emocionantes acciones de electricidad se convirtieron en aburrida infraestructura regulada, un hecho reflejado en la humilde casilla "Compañía Eléctrica" del tablero original de Monopoly de 1935. 🎲

🧐 Lecciones de los Años Veinte para la Era de la IA

La IA se está desplegando más rápido de lo que incluso sus impulsores pueden gestionar adecuadamente. Al igual que la electricidad hace un siglo, unas pocas empresas interconectadas están construyendo la infraestructura de la IA actual. Y como hace un siglo, los inversores se lanzan en masa, a menudo desconociendo su vulnerabilidad a través de fondos de pensión o ETFs.

La regulación de la IA sigue siendo laxa en muchas partes del mundo, aunque la Unión Europea está adoptando un enfoque más riguroso con su primera ley mundial sobre IA. 🇪🇺 En contraste, Donald Trump ha optado por eliminar la "regulación onerosa" de la IA, mientras algunos estados de EE. UU. toman medidas por su cuenta. Los tribunales están limitados por leyes y definiciones redactadas para una era diferente. ¿Podemos transitar hacia que la IA se convierta en una infraestructura invisible como la electricidad sin otro hundimiento, seguido solo entonces por una reforma? 🤔 Si los paralelismos con el auge de la electrificación pasan desapercibidos, las posibilidades de evitar una repetición son escasas. La historia económica nos advierte que la innovación sin regulación y previsión puede llevar a un ciclo de auge y caída, con graves consecuencias sociales y económicas que, en el contexto de la IA, podrían ser aún más complejas de gestionar, como se analizó en el debate sobre Bill Gates y la IA plantean preguntas sobre áreas "irreemplazables" como la programación, biología y energía, una visión que la perspectiva europea matiza críticamente.


La historia del auge y caída de la electricidad en los Felices Años Veinte ofrece una inquietante hoja de ruta para la era actual de la Inteligencia Artificial. La IA, con su promesa transformadora y su rápida concentración de poder, presenta paralelismos innegables con la electricidad en su momento cumbre. La lección principal es clara: la falta de regulación, la euforia especulativa y la concentración de mercado pueden llevar a un colapso con profundas repercusiones socioeconómicas. El desafío ahora es aprender de la historia para evitar repetir los mismos errores, guiando la IA hacia un futuro de infraestructura invisible y beneficio generalizado, sin desencadenar una nueva "Gran Depresión" digital.